TAN LEJOS... TAN CERCA...

Las artes de combate han ecorrido un largo camino, un camino lleno de batallas, luchas y duro estudio y trabajo para preservar la propia integridad y la de lo que nos rodea...
Con el tiempo es camino ha adquirido connotaciones menos dramáticas y cruentas derivando hacia el deporte y la simple actividad física, pero en la esencia del ser humano en nuestro interior se alberga todavía la memoria de esas luchas por la supervivencia. En nuestro cerebro pervive "el cerebro reptil" el último reducto de "nuestra parte animal" donde anida el instinto mas atávico.
Renegar de los impulsos, las emociones y los sentimientos es rechazar parte de nuestro ser, conocerlos nos ayuda acanalizarlos y a ser conscientes de su existencia y de como tratarlos.
La historia ha sembrado de recuerdos de esas luchas nuestras tradiciones, es importante aprender de ellas y de cada una de sus consecuencias.